Los koalas
tienen un sistema inmunitario muy débil, que les hace propensos a todo tipo de
enfermedades respiratorias, digestivas y urogenitales, úlceras de estómago,
cánceres, deshidratación y atrofia muscular.
Asimismo,
tienen una gran tendencia a padecer de estrés que, sumado a su gran actividad
en la época de apareamiento, provoca que sean más vulnerables a enfermedades en
ese período.
Además, suelen
sufrir infecciones de clamidia. Cuando llueve, a los koalas enfermos se les queda
el pelaje húmedo. También las garrapatas se les pegan con gran facilidad. Por si fuera
poco, los koalas más viejos pueden llegar a morir de hambre por el desgaste de
sus dientes, ya que no son capaces de seguir masticando las hojas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario